Hollywood nunca ha estado ajeno a los grandes males de la humanidad. Puede que haya tardado en reflejarlo pero siempre ha sido conciente de la cantidad de gente que va al cine a limpiar su conciencia. La opresión racial, el sida, las guerras… han sido temas a tratar.
El año pasado una película donde se criticaba a la industria farmacéutica se coló en los Oscar. Fue todo una gran sorpresa.
Este año tenemos nueva ración. Tal film es “El señor de la guerra”. El señor de la guerra es una película de Hollywood. Hecha para el gran público. Con actor conocido una trama interesante y un tema candente “El tráfico de armas”
El Señor de la guerra. Es un film simplón con un guión lleno de artificios. Todo ello colorado con velocidad narrativa trepidante. El actor principal nos presenta la película.
Durante las más de dos horas. El sobrino de Coppola nos guiará. En ningún momento nos perderemos. Su voz en off nos dirá en que parte de la trama estamos.
Para hacerla atractiva a la masa. La película se rellena con un drama familiar una historia de amor rota…
Aunque el propósito sea loable el envoltorio falla. Pero no debemos desesperar si el objetivo es que millones de personas vean como las manos de los poderosos están manchadas de sangre, mientras el pueblo mira para otro lado.
Esta película podría ser un gran documental. ¿Pero quien coño lo iría a ver?
A pesar de todo; bienvenida sea; si ella sirve para abrir conciencias.
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