26 de agosto de 2006

CORSERVADURISMO INDIRECTO




Para escribir este artículo podría comenzar; hablando de que el ser humano es un ser relacional. Su existencia se basa en la interrelación con otros de su especie.
Nacemos según dicen algunos con el fin natural de la procreación.

La pareja ya sea en sus múltiples posibilidades. Es la unión mínima de convivencia.
En la sociedad occidental. Sólo cabe esta posibilidad. Aunque el ser humano es un ser polígamo. Las cuestiones morales y religiosas así lo han ordenado.
Si por las leyes naturales nos guiáramos. El hombre intentaría fecundar todas las hembras que pudiera. Pero ante todo somos un ser racional.

El ser racional implica la experimentación de un sentimiento llamado amor.
El periodo de enamoramiento tiene una duración según estudios científicos de unos seis meses. En este periodo nuestro cuerpo genera múltiples sustancias. Sustancias que nos hacen actuar de manera pasional. Pero todo esto se termina. El desgaste físico y emocional es elevado. No se puede mantener de forma infinita.

La Revolución Industrial cambio nuestras condiciones de vida. Nos tuvimos que adaptar al nuevo ritmo de vida. La mujer se incorpora al trabajo. Su papel de madre y ama de casa se rompe.
En las últimas tres décadas. La aparición de la píldora anticonceptiva da un vuelco a la relación hombre y mujer. La revolución sexual es también responsable de este cambio.
Comienza una normalización de aquellas personas que por su orientación estaban marginadas.

Fruto de estas revoluciones. Aparece el prototipo Bud Baxter (personaje principal del apartamento)
El genial Billy Wilder. Retracto lo que sería el hombre del futuro. Aquel que llegaría a casa y se prepararía cualquier comida precongelada. Se pondría a ver el partido. O saldría con los amigotes. El trabajo comería la mayoría de su tiempo

En los ochenta surge el yupy . Un hombre que vive para el éxito. Sus relaciones efectivas no tienen como objetivo el matrimonio. Esta figura se mantiene en la década posterior.
Con el potencial de estas mujeres y hombres solteros. Que como pronostico Wilder. Aparece todo una serie de productos para este nuevo grupo. Las comidas individuales las casas simples y las promociones.
El sexo mueve es el motor de las relaciones. No se busca la protección. Por encima de todo esta la realización personal. Somos egoistas.

Pero este nuevo siglo no has deparado una buena sorpresa. Todo lo que se había conquistado se esta cayendo cacho a cacho. En la actualidad la pareja es para la mayoría el clímax de se realización personal. El matrimonio nunca fue tan demandado. Aunque la tasa de divorcios supere a los matrimonios celebrados.
Pero a que se debe todo esto. Pues a motivos políticos, económicos, religiosos…
Políticos. El conservadurismo se ha instaurado de forma brusca. El país más grande del mundo predica el matrimonio y como fin la procreación. Fidelidad y abstinencia es el nuevo lema contra todo mal.
Comentaba recientemente una prestigiosa sexóloga; como la televisión fiel reflejo de el mundo había ya hecho suya esta nueva filosofía. Por ejemplo; El final de una serie donde por primera vez se hablo sin tapujos de la sexualidad femenina. Las tres protagonista femenina acaban felices y cuasi casadas. Esto según ella unos años antes; el público no lo hubiera tolerado.

Económicos y sociales: Tan simple como el hacer frente a una hipoteca. Resulta todo una proeza hacerlo uno solo. El ser madre o padre soltero lo mismo.
Pero sin lugar a duda esta obsesión por la media naranja. Se debe al miedo. Nuestro último destino es la muerte. Algo que lo haremos sin compañía De alguan manera tenemos que suplir la forzada soledad. Al que debemos unir la inestabilidad continúa en la que vivimos
. Las penas compartidas son menos dolorosas.

Como ejemplo; es ilustrativo que a raíz de los atentados del 11S. El número de matrimonios y nacimientos en New York. Sufrío un aumento exponencial.

Y algo importante la presión ejercida por la propia sociedad. Todavía tener pareja implica madurez. La vida la hemos diseñado como un conjunto de etapas a quemar. Nuestra pareja o hijos no son trofeos para exhibir. (En estos tiempos nadie queda fuera del mercado)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me ha gustado mucho el articulo. A veces me pregunto si con el que estoy en la cama es realmente la persona que quiero. El amor no es pasividad.